Balcones engalanados, altares en las fachadas de las casas, calles llenas de alegría e ilusión… con este ambiente, nuestro pueblo recuperaba el pasado fin de semana otra de sus tradiciones, la celebración del Corpus Christi, con la Salida Procesional del Santísimo Sacramento.
Este año la festividad se ha vivido con una gran emotividad dado los dos últimos años de ausencia por la pandemia, lo que ha supuesto una mayor participación vecinal.
Un salida procesional a la que durante la tarde del sábado también se sumó la ilusión de los más pequeños que este año han hecho su Primera Comunión y que formaron parte del Cortejo, haciendo que la Procesión del Corpus Christi en Castilblaco luciese en todo su esplendor.