Las actividades en la Escuela de Verano llegan a su fin, habiendo atendido a casi un centenar de niños y niñas durante la temporada estival

En tan sólo cuatro días, nuestros más pequeños cambiarán sus actividades al aire libre por sus mochilas con libros. Y es que el CEIP Miguel de Cervantes volverá a abrir sus puertas el próximo martes en horario escolar.

Unas instalaciones que durante los meses de julio y agosto se han mantenido abiertas con motivo de la Escuela de Verano, por la que han pasado en torno a un centenar de niños con edades entre los 3 y los 12 años, a lo largo de todo el tiempo estival.

Con la colaboración de la Diputación de Sevilla, “gracias a este servicio, hemos ofrecido a nuestros menores el poder disfrutar de unas vacaciones cargadas de actividades, al mismo tiempo que hemos facilitado  a sus familias la conciliación de la vida familiar y laboral”, ha destacado la Concejala de Servicios, Mónica Torres.

Además de los talleres de manualidades, cocina, baile y otras actividades al aire libre, los niños y niñas que se han beneficiado de esta Escuela de Verano, abierta de 9:00 a 14:00h, también han disfrutado de una hora de baño diario en la Piscina Municipal, habiéndose empleado a un total de 3 monitores.

Un servicio al que también se ha sumado el del comedor de verano, por el que han pasado diariamente una veintena de menores, de los cuales a 10 de ellos el Ayuntamiento ha sufragado íntegramente los costes de este servicio, al pertenecer a familias en riesgo de exclusión social.

“Desde el año 2012, el Ayuntamiento en colaboración con la Obra Social La Caixa y con la intención de que ningún menor se vea afectado por la situación económica de su familia pone en marcha este servicio tanto en la época estival de verano como durante las vacaciones de Navidad, garantizándole así una correcta alimentación con tres comidas diarias”.